Por increíble que parezca, creer
en algo hoy en día, es casi una obligación. Pero hay algunas cosas en las que
creemos (todos), y que hay quien admite y quien no lo admitirá jamás.
Ah!!! Por cierto, el título es correcto.
Porque en esta ocasión, hablamos
del Gloss de tus labios, de mis
labios, de nuestros y vuestros labios, y de aquellos labios que se besan, se
besaron y se besarán, cuando menos os lo esperéis. De ese maravilloso “yo creo en ti” que normalmente se
encuentra en el fondo de cualquier bolso. Sea pequeño, mediano o grande,
siempre hay sitio para un gloss. Y en eso no sólo creen las mujeres. Los hombres
también creemos.
Porque las chicas, nunca saldrán
sin ese… digamos, “tesoro”, de casa. Sea
para ir al trabajo, al comprar aquí al lado, al cine, y algunas se retocan
hasta para pasear al perro, para pedirle sal al vecino, o simplemente para mirarse
al espejo. Estupendo. Pero sobre todas las cosas, ese “yo creo en ti” se acentúa cuando ellas salen de fiesta. Ese gloss corre
como el Usain Bolt los 100, en los cuartos de baño de los garitos. Estoy seguro
que en esos momentos decidir entre usar el móvil o usar el Gloss… no sé si no
habría tirones de pelo (agggbufffeiiidejameeeee…) y alguna bofetada que otra.
Espero que no.
El tema colores, ya es más
personal. Depende de la ocasión, del tiempo (también del tiempo que hace que no
sales…) De si has quedado con amigas malotas, o con algún chico. Si el chico te
gusta, será un color más… rojo Kiko. Digamos
que puede ser un tono como más dulce al paladar. Por cierto, el rojo Ferrari es
el color que más tira a algunos
hombres. Luego están los lilas, que a los tontos espabila. Los tonos en rosa,
que el amor se posa, y los tonos rojo grana, que con ese haces lo que te dé la
gana… El color también puede variar entre cuando te vas de casa, que será un
color más de niña buena, y que en la mayoría de casos, no es el mismo de cuando
vuelves. Si es que en tus labios queda algo…
Antes cuando decía que todos
creíamos en Gloss, me refería a que a
los hombres, aunque muchos no lo van a admitir, nos gusta mucho. Porque besar unos
labios sin un buen Gloss que los
cubra, ya no es lo mismo. Esa especie de pringue que te queda esparcido por los
labios, resulta intrigante, porque por un lado piensas, joder, como me estoy poniendo Gloss… y por otro lado piensas… joder, como me estoy poniendo de besar estos
labios…me encanta!!! O sea, que nadie admita que le gusta el sabor de un Gloss, no me lo creo.
Jo admito que me gusta, y que la
mezcla del Gloss con los labios que
me besan… es la combinación perfecta para cualquier momento del día, de la
noche y para lo que surja.
Así que para ellos y para ellas,
creed en Gloss, no sólo está de moda,
es que mola mazooooo!!!
No hace falta que recéis… pero
una sonrisita ahora que no os ve nadie, también molaría…eh?
No leemos en la próxima….
Feliz semana
Lorenzo López