Lo que suena es lo que hay, y lo que hay es lo que tenemos. Suelto o atado,
limpio o sucio, entre uno u otro, o entre otro y el de más allá.
Porque esto es lo que hay…
Hay fresas con nata, nata con nueces, nueces con miel y la miel de tus
labios. Hay corazones en pedazos y pedazos de corazones. Hay diccionarios con
palabras y palabras sin dirección. Hay miedo de sobra, suspiros espontáneos, gemidos
para dos, abrazos para ti, para ellos, para nosotros, para todos.
Hay cuestión de gusto y para gusto los colores. Hay colores a cientos y
pinceles sin dueño. Hay malos malísimos y buenos con preaviso. Hay deseos
deseados y deseados que desean. Hay que abrirse, conocerse, probar hay y habrá.
Hay quien pide por pedir y por pedir que no quede. Hay tesoros
escondidos en el alma, y desnudos cubiertos de ganas. Hay motivos que nunca sobran y hay de sobras
para todos, porque nadie sobra.
Hay rebajas tan rebajadas, que humillan al
tanto por ciento. Hay saludos por cortesía y lo cortés no quita lo valiente, ni
lo valiente las ganas, ni las ganas de quererte. Hay destacados que pasan
desapercibidos y hay apercibidos sin sancionar.
Hay besos que se besaron a tientas y besos que siempre será el beso, "el
primero". Hay besos con secretos y secretos firmados con besos. Hay tu beso mío
y el mío tuyo. Hay besos que saben a tus
labios. Hay besos y besitos, y besazos para grupos. Hay besos para dormir. Hay
besos de despedida. Hay besos de reencuentro, y hay besos para los que vienen y
para los que van. Hay besos robados en la oscuridad sin más.
Hay altos, altillos, y bajos y bajones. Hay listos y listones… “más
madera señores”. Hay macarras con castigo y macarrones para compartir contigo. Hay
sabios y sabiondos y envidiosos de cojones. Hay el “maldita sea” y el “me cachis
en la mar”. Hay recuerdos dos
veces locos. Hay cada dos por tres y cinco más uno seis. Hay cositas pequeñitas
que no las encuentra ni Pulgarcita.
Hay salud sin “pelas” y hay
quien se la pela. Hay bonitos en escabeche y bonitos que dan la lata. Y hay fidelidad
de la que no te puedes fiar. Hay balance, grabes y agudos, y hay espárragos “cojonudos”.
Hay dulces que amargan y amargados a distancia. Hay pintas de cerveza, hay
malas pintas y judías pintas que dan guerra al salir, y también hay los que
nunca pintan nada.
Hay domingos por la tarde y tardes de cualquier día. Hay un instante
para ti en mi vida, y una vida que se hace un instante contigo. Hay futuro
cierto e incierto hasta cuándo… Hay pitos y flautas. Hay más que menos. Hay un
poco de esto y un poco de aquello. ¿Hay o no hay? Hay, si hubiese más de todo
un poco.
Hay idiomas obligados y olvidados de donde vienen. Hay tentaciones
capitales que viven del pueblo y hay pueblos que viven de sus “capitales”. Hay cosas de casa y para
quien se casa, hay muchas cosas. Hay vergüenza y sinvergüenza. Hay sabores que
saben a poco y hay muy poco que sabe a algo. Hay despiertos que sueñan y sueños
que no te dejan dormir.
Hay esto, aquello y lo otro. Hay miles de millones, de millones
de maneras de ser y hay que ser para estar. Hay ganas de ir y de volver. Hay vueltas
en monedas y monedas de cambios. Hay mentiras prometidas para mañana y mañana
Dios dirá. Hay rezos orados y oraciones sin rezar. Hay pesos exactos y pesos
pesados. Hay puntos y aparte, y partes sin punto de partida. Hay medidas que
miden distancias y hay distancias que hacen olvido.
Hay parejas de ases. Hay ases de copas y copas para brindar. Hay brindis
por nosotros y no hay nosotros sin ti. Hay velas encendidas para citas y hay
citas apagadas. Hay llantos de alegría que valen la pena y hay penas más valdría no sufrir.
Hay sentimientos con sentido y hay sentido en los sentimientos.
